La mediación familiar es un proceso valioso para resolver conflictos dentro de las relaciones familiares. Una parte fundamental de este proceso es la habilidad del mediador para abrir y cerrar temas de manera efectiva. A continuación, explorare esta técnica y proporcionaré ejemplos para una mejor comprensión.

1. Apertura de temas

La apertura de temas es el momento en que el mediador introduce un asunto específico para su discusión. Aquí hay algunas estrategias clave:

a. Establecer un ambiente seguro

El mediador debe crear un espacio donde las partes se sientan cómodas compartiendo sus preocupaciones. Por ejemplo, podría decir: “Vamos a hablar sobre la distribución de las responsabilidades de cuidado de los padres”.

b. Preguntas abiertas

El mediador utiliza preguntas abiertas para explorar el tema. Por ejemplo: “¿Cómo ven ustedes la situación actual con sus padres?”.

c. Escuchar activamente

El mediador escucha atentamente las respuestas de las partes, validando sus emociones y mostrando empatía. Por ejemplo: “Entiendo que esto es un tema sensible para ambos”.

2. Cierre de temas

El cierre de temas es igualmente importante para mantener el proceso de mediación enfocado y productivo:

a. Resumen y confirmación

El mediador resume lo discutido y verifica si se ha llegado a un acuerdo provisional. Por ejemplo: “Hemos hablado sobre las responsabilidades de cuidado y acordamos que Laura se encargará de las compras y Carlos visitará a los padres regularmente”.

b. Derivación a otro tema

Si el tema está agotado o no se puede resolver en ese momento, el mediador puede derivar a otro asunto. Por ejemplo: “Ahora hablemos sobre la comunicación entre ustedes durante las visitas”.

c. Cierre positivo

El mediador concluye el tema de manera positiva, enfocándose en los avances logrados. Por ejemplo: “Estamos avanzando en la distribución de responsabilidades y eso es un buen paso”.

Un ejemplo práctico

Imaginemos a Laura, Carlos y Víctor, quienes están discutiendo el cuidado de sus padres. El mediador abre el tema diciendo: “Hablemos sobre cómo pueden colaborar en el cuidado de sus padres”. Después de una discusión, el mediador resume: “Laura se ocupará de las compras y Carlos visitará a los padres regularmente. ¿Están de acuerdo?”. El tema se cierra con un enfoque positivo en el progreso realizado.

En resumen, la técnica de abrir y cerrar temas en mediación familiar es esencial para facilitar la comunicación y llegar a acuerdos constructivos. El mediador debe equilibrar la empatía con la dirección del proceso, guiando a las partes hacia soluciones mutuamente beneficiosas.

La técnica de abrir y cerrar temas en mediación familiar tiene sus ventajas y desventajas. A continuación, exploraremos ambos aspectos:

Ventajas de la técnica:

1. Facilita la comunicación: Al introducir temas de manera estructurada, se crea un espacio para que las partes expresen sus preocupaciones y necesidades de manera más efectiva.
2. Enfoque estratégico: La técnica permite al mediador guiar la conversación hacia áreas específicas, evitando divagaciones y manteniendo el proceso enfocado.
3. Empoderamiento de las partes: Al abrir y cerrar temas, las partes se sienten más involucradas y responsables en la búsqueda de soluciones.
4. Claridad y organización: La técnica proporciona una estructura clara para abordar múltiples asuntos, lo que ayuda a evitar confusiones y malentendidos.

Inconvenientes:

1. Rigidez excesiva: Si el mediador sigue un enfoque demasiado rígido, podría perder oportunidades para explorar temas emergentes o inesperados.
2. Resistencia de las partes: Algunas partes pueden sentirse presionadas o limitadas por la técnica, especialmente si desean discutir asuntos fuera del marco establecido.
3. Posible omisión de temas relevantes: Si el mediador no es lo suficientemente flexible, podría pasar por alto temas importantes que no encajan en la estructura predefinida.
4. Necesidad de adaptación: La técnica no es universalmente aplicable; el mediador debe adaptarla según las dinámicas específicas de cada caso.

Más ejemplos prácticos:

1. Apertura de temas:
   • El mediador introduce el tema de la custodia compartida diciendo: “Hablemos sobre cómo pueden organizar el tiempo con los hijos después del divorcio”.
   • Las partes comparten sus preferencias y preocupaciones.
2. Cierre de temas:
   • Después de discutir la pensión alimenticia, el mediador resume: “Acordamos que Juan pagará X cantidad mensualmente”.
   • El tema se cierra con un enfoque positivo en el progreso logrado.

En resumen, la técnica de abrir y cerrar temas en mediación familiar es una herramienta valiosa, pero su aplicación debe ser flexible y adaptada a las necesidades de las partes.

La técnica de abrir y cerrar temas en mediación familiar es aplicable en diversas situaciones durante el proceso de mediación. A continuación, te presento cuándo y cómo creo que debes utilizar esta técnica:

1. Apertura de temas:
   • Inicio de la sesión: Al comienzo de la mediación, el mediador puede utilizar la técnica de apertura para introducir los temas clave que se abordarán. Por ejemplo, al hablar sobre la custodia compartida, el mediador podría decir: “Hablemos sobre cómo pueden organizar el tiempo con los hijos después del divorcio”.
   • Emergencia de nuevos asuntos: Si durante la mediación surgen temas no previstos, el mediador puede abrirlos para su discusión. Por ejemplo, si una de las partes menciona problemas financieros, el mediador podría decir: “Vamos a explorar cómo manejar las cuestiones económicas”.
2. Cierre de temas:
   • Acuerdo provisional: Después de discutir un tema específico, el mediador puede cerrarlo resumiendo lo acordado. Por ejemplo, si se habló sobre la pensión alimenticia, el mediador podría decir: “Acordamos que Juan pagará X cantidad mensualmente”.
   • Derivación a otro tema: Si un tema está agotado o no se puede resolver en ese momento, el mediador puede derivar a otro asunto. Por ejemplo, “Ahora hablemos sobre la comunicación entre ustedes durante las visitas”.
   • Cierre positivo: Al finalizar un tema, el mediador puede enfocarse en los avances logrados. Por ejemplo, “Estamos avanzando en la distribución de responsabilidades y eso es un buen paso”.

En resumen, esta técnica se utiliza a lo largo de todo el proceso de mediación para facilitar la comunicación, mantener el enfoque y llegar a acuerdos constructivos. El mediador debe adaptar su enfoque según las dinámicas específicas de cada caso.

GRACIAS

José A. Veiga