Desventajas de la mediación en los casos de acoso escolar.

En la sociedad actual, donde los conflictos escolares y el acoso entre estudiantes son cada vez más frecuentes, es crucial abordar estos problemas de manera efectiva. La mediación se ha propuesto como una herramienta para resolver conflictos y prevenir el acoso escolar. Sin embargo, es importante considerar las desventajas de aplicar la mediación en casos de acoso, especialmente cuando existe un desequilibrio de poder entre las partes involucradas.

Será un post que creará y generará diferentes opiniones, todas respetables. Muchas en desacuerdo con lo que escriba; solo quiero aportar mi experiencia como coordinador de convivencia despúes de 25 años, y 15 aplicando la mediación educativa.

Por desgracia, he vivido muchos casos de acoso escolar y cada uno es diferente, porque cada alumno es distinto, tanto acosados como acosadores.

Hablamos de casos reales de acoso escolar, ya identificados, no de prevención ni de educación, ese es otro tema. Para diagnosticar un caso de acoso escolar hay que contestar un protocolo establecido por profesionales del mundo de la educación: tutores, orientadores, coordinadores de convivencia, director, coordinadores de etapas, …

Desventajas de la mediación en casos declarados de acoso escolar

  1. Equilibrio de poder desigual: La mediación presupone que las partes involucradas están en igualdad de condiciones. Sin embargo, en situaciones de acoso escolar, esto rara vez es el caso. El acosador suele tener más poder o influencia sobre la víctima, lo que dificulta la negociación equitativa durante la mediación. Obligar a la víctima a sentarse con el acosador o compartir actividades estrechas puede revictimizarla.
  2. Revictimización potencial: La mediación puede exponer a la víctima a situaciones incómodas o traumáticas al interactuar directamente con el acosador. Esto podría aumentar su ansiedad y miedo, especialmente si no se siente protegida durante el proceso. La prioridad debe ser proteger a la víctima y sancionar al acosador de manera educativa, no punitiva.
  3. Falta de responsabilidad: La mediación puede minimizar la responsabilidad del acosador al tratarlo como un igual en el proceso. En lugar de enfrentar consecuencias claras por su comportamiento, el acosador podría evitar la rendición de cuentas. Esto podría perpetuar el ciclo de acoso y no garantizar una solución efectiva.
  4. Complejidad emocional: El acoso escolar es una experiencia emocionalmente cargada para la víctima. La mediación puede requerir que la víctima comparta sus sentimientos y experiencias con el acosador, lo que podría ser angustiante. Además, la empatía necesaria para la mediación podría ser difícil de lograr en casos de acoso extremo.
  5. Ineficacia en casos graves: En situaciones de acoso severo o prolongado, la mediación puede no ser suficiente para abordar el problema. La víctima podría necesitar medidas más contundentes, como la intervención de las autoridades escolares o incluso legales. La mediación podría no ser capaz e resolver la situación de manera adecuada.
  6. Confidencialidad comprometida: La mediación implica que las partes compartan sus experiencias y sentimientos. Sin embargo, en situaciones de acoso, la víctima podría sentirse incómoda al revelar detalles personales frente al acosador. Esto podría afectar la confianza y la privacidad de la víctima.
  7. Falta de sanciones efectivas: La mediación se centra en la resolución pacífica y la comunicación. Sin embargo, en casos de acoso, simplemente hablar no es suficiente. El acosador necesita enfrentar consecuencias claras para su comportamiento. La mediación podría no proporcionar una sanción adecuada.
  8. Presión social y miedo: Durante la mediación, la víctima podría sentirse presionada para perdonar o ceder ante el acosador debido a la presión social o al miedo a represalias. Esto podría no ser en el mejor interés de la víctima y podría perpetuar el acoso.
  9. Incapacidad para abordar dinámicas grupales: En situaciones de acoso escolar, a menudo hay dinámicas grupales involucradas. La mediación se centra en las partes individuales, pero no necesariamente aborda la influencia del grupo o la cultura escolar que permite el acoso.
  10. Tiempo y recursos limitados: La mediación puede ser un proceso largo y requiere la participación activa de todas las partes. En un entorno escolar con recursos limitados, podría no ser la solución más eficiente para abordar el acoso.

Es importante considerar estas desventajas al implementar la mediación en casos de acoso escolar y buscar un enfoque integral que priorice la seguridad y el bienestar de la víctima.

Conclusión

Si bien la mediación puede ser útil en algunos conflictos escolares, su aplicación en casos de acoso debe ser cuidadosa y considerada. Es fundamental proteger a la víctima y garantizar que el proceso no la revictimice. La prevención y la educación sobre el acoso escolar siguen siendo esenciales para crear un entorno seguro y saludable en las escuelas.

GRACIAS y perdón si alguno/a se ha sentido ofendido.

José A. Veiga

Deja un comentario